Pasa por ser cierto que el texto de los autores griegos antiguos necesita de una revisión periódica, que lo actualice y que incorpore las novedades del corpus, así como las bibliográficas. Este aserto aumenta su veracidad cuando se trata de poetas que componen un abanico diverso y disperso, como es el caso de la elegía de época helenística. Sin restar méritos a dos obras beneméritas como los Collectanea Alexandrina (1925Powell, I. U. (1925) Collectanea Alexandrina. Reliquiae Minores Poetarum Graecorum Aetatis Ptolemaicae, Oxford: Clarendon Press.), de Powell, y el Supplementum Hellenisticum (1983Lloyd-Jones, H., Parsons, P. J. y Nesselrath, H. G. (1983), Supplementum Hellenisticum. Berlín: de Gruyter.), de Lloyd-Jones y Parsons, el tiempo pasado y los avances realizados en el estudio del género elegíaco hacían cada día más necesaria una obra magna como la que en estas páginas reseñamos, que recopilase en un volumen monográfico el texto actualizado de todos estos poetas, la primera traducción completa que de ellos se hace en lengua española y un análisis riguroso de la aportación literaria del período helenístico a un género de tanta importancia como la elegía. La obra de Gallé Cejudo colma generosamente esta necesidad con su erudita edición de este tipo de poesía caracterizada por la ejecución depurada, su preciosismo lingüístico, las digresiones y las extrañas anécdotas, una mezcla de τέχνη y de σοφία.
Las pp. VII-XI corresponden al Índice pormenorizado de la materia tratada en el volumen. La Introducción ocupa las pp. XV-XLIV, abordando cuestiones previas básicas como la elegía helenística como materia de estudio diferenciada y su adecuada valoración en el marco de la poesía helenística, así como su adaptación en este período a unas nuevas necesidades, que la convirtieron en un género prolífico y diverso. Precisamente una de las características más notables de esta elegía remozada es la frecuente utilización del mito y su empleo como recurso etiológico, cuestiones a las que el autor dedica las pp. XXII-XXX. A la forma catalógica de la elegía helenística están consagradas las pp. XXX-XXXIII, mientras que a la temática erótica, de capital importancia, están dedicadas las pp. XXXIII-XXXVII. A los llamados «microgéneros», es decir, los géneros menores o subgéneros eruditos, tales como fundaciones, maldiciones, metamorfosis, etc., a menudo formando parte del excurso digresivo, consagra Gallé las pp. XXXVII-XL. De manera más breve aborda la elegía perdida (pp. XL-XLI), entendiendo por esta todos aquellos poetas más conocidos por su incidencia en otros géneros, pero a los cuales la tradición literaria atribuye nominalmente su participación en el género elegíaco. En las pp. XLI-XLIV Gallé justifica su edición y su traducción, haciendo un repaso de las ediciones colectivas anteriores, desde la obra de Meineke, Analecta Alexandrina (1843Meineke, A. (1843) Analecta Alexandrina: Sive Commentationes de Euphorione Chalcidensi Rhiano Cretensi Alexandro Aetolo Parthenio Nicaeno. Berlín: sumptibus Th. Chr. Fr. Enslini.), hasta el antedicho Supplementum Hellenisticum, así como de las distintas ediciones singulares que se han producido, especialmente en las últimas décadas, como las de Filitas (Spanoudakis, 2002Spanoudakis, K. (2002) Philitas of Cos. Leiden – Boston: Brill.), Hermesianacte (Kobiliri, 1998Kobiliri, P. (1998) A Stylistic Commentary on Hermesianax. Amsterdam: Hakkert.), Alejandro de Etolia (Magnelli, 1999Magnelli, E. (1999) Alexandri Aetoli Testimonia et Fragmenta. Florencia: Università degli Studi di Firenze.) o Partenio (Lightfoot, 1999Lightfoot, J. L. (1999) Parthenius of Nicaea. The Poetical Fragments and the Erotika Pathémata. Oxford: Clarendon Press.), por ejemplo. La Bibliografía ocupa las pp. XLV-XC.
Los elegíacos editados en el presente volumen van precedidos de una erudita introducción, en la que se abordan las cuestiones fundamentales para su estudio, así como los testimonios literarios antiguos. Los poetas editados están agrupados en tres grandes bloques, de suerte que la parte I está consagrada a los principales elegíacos, a saber: Filitas de Cos1
La pulcra edición de Gallé presenta un texto muy cuidado y meditado, revisando de manera pormenorizada toda la crítica anterior de unos textos que, dado su carácter fragmentario y su, a menudo, tortuosa transmisión plantea graves problemas para su fijación. En este punto el editor se muestra cauto a la hora de caminar por los arriesgados limina de la conjetura. Por su parte, la traducción, en un castellano limpio y elegante, es el resultado de esa difícil tarea consistente en conjugar con armonía la literalidad y la literariedad, un empeño del que el autor sale sumamente airoso. Las introducciones a cada uno de los autores, así como las amplias y abundantes notas explicativas a cada fragmento, son muy eruditas y pertinentes, con objeto de no dejar ningún cabo suelto en el comentario e interpretación, demostrando un gran conocimiento de una bibliografía que actualmente ya constituye un corpus de notable consideración, tanto por su amplitud como por su diversidad.
El volumen se cierra con un indispensable Índice de nombres propios (pp. 811-838), que siempre resulta un instrumento útil.
En definitiva, estamos ante una obra llamada a ser una referencia obligada para el estudio de la poesía helenística y un instrumentum philologicum de primer orden tanto para los estudiosos como para quienes deseen un acercamiento al conocimiento de lo que supuso la evolución y el desarrollo de la elegía de época helenística.