El libro Palabras para la música. Herencia grecolatina en la terminología musical del profesor Jesús Luque Moreno consiste en un completo estudio del léxico de la música antigua grecorromana. En él se ofrece una visión interdisciplinar de la terminología musical, en la que se incluye el léxico latino de la métrica, de la versificación y de la gramática en relación con la música. Se trata de una obra de gran valor y utilidad tanto para filólogos como para musicólogos puesto que profundiza y aclara conceptos de la teoría musical antigua que resultan complejos incluso para quienes poseen conocimientos avanzados en este campo. Como es sabido, la teoría musical antigua, en la que se centra este libro, está muy alejada de la música occidental. Entre estos dos mundos distan siglos, y se encuentra entre ambos el universo de la música medieval, radicalmente distinta a la música grecorromana, y que será el fundamento de la teoría musical moderna. Resulta por este motivo fundamental estudiar la evolución de los conceptos musicales y las doctrinas más importantes a lo largo de los siglos, desde su concepción en época clásica, pasando por la música medieval, hasta la época moderna, para conocer con mayor profundidad la evolución de la música a lo largo de la historia. Para este fin, el libro Palabras para la música es una herramienta indispensable que reúne en un solo volumen los conceptos musicales de la teoría musical grecolatina más importantes y que ha cubierto la necesidad de un libro de estas características en español.
Todos los términos, conceptos y doctrinas que se abordan en este volumen están acompañados de extractos de autores clásicos que ayudan a comprenderlos mejor en su contexto. Estos textos se encuentran en su lengua original, en griego o latín, de manera que la reflexión sobre la terminología resulta más completa. Además, el autor siempre acompaña los testimonios con su traducción castellana, lo que permite acercar estos textos a todos los públicos y facilitar así la comprensión de los mismos.
En este libro, el profesor Luque Moreno resume su trayectoria investigadora dedicada a la versificación, métrica y gramática, que se han vinculado muchas veces con la música antigua y su léxico. Aquí se reúnen, en palabras del autor (p. 10), notas y puntualizaciones que fue elaborando a partir de sus trabajos sobre léxico latino de la métrica que realizó en diversos proyectos de investigación, seminarios y clases, algunos ya publicados y otros inéditos, y que compila en este libro.
La obra se articula en torno a siete bloques monográficos de diversa naturaleza que, a modo enciclopédico, desarrollan pormenorizadamente lo relativo a cada uno de los conceptos y doctrinas musicales.
El primer bloque, (A) «La música» (pp. 13-126), inicia con un capítulo dedicado a la relación de la música y las Musas, y continúa con la concepción de la música como arte y ciencia, después se repasa su definición por parte de distintos teóricos grecorromanos, y finaliza así con la relación entre la gramática y la música. El bloque (B), «La estructura musical» (pp. 127-214), estudia la armonía y el ritmo, los dos componentes fundamentales de la música, y aborda las doctrinas armónicas más importantes: la aristoxénica y la pitagórica. El bloque (C), «La materia de la música: el sonido» (pp. 215-436), se ocupa de la acústica del sonido; de los conceptos de tensión y tono; de la altura musical y el léxico asociado a ella en las lenguas modernas; y del nombre de las notas musicales en la Antigua Grecia, tomado de las cuerdas de la lira. El bloque (D), «La música como concordia» (pp. 437-564), versa sobre las relaciones de consonancia y disonancia que se establecen entre sonidos. En este capítulo se realiza una profunda reflexión sobre los términos empleados para referirse a la consonancia entre sonidos y se apoya en testimonios antiguos y modernos. En el bloque (E), «Musica humana, mundana, caelestis: transcendencia de la música» (pp. 565-708), el autor aborda la concepción de la música de las esferas, que está en relación con el universo y que se divide, según el pensamiento griego antiguo, en música celestial y música terrenal, siendo la segunda imitadora de la primera. En este capítulo, se contempla la evolución de esta concepción de la música en el mundo romano, de la mano de Plinio y Boecio, así como en la Edad Media y las épocas posteriores. El bloque (F), «Addenda» (pp. 709-834), se divide en cuatro subapartados. El primero de ellos se centra en la música en la Roma imperial, a través de extractos de la obra de Séneca. El segundo hace una reflexión sobre el término institutio, empleado ampliamente en manuales de música antigua, a través del análisis de su uso como título en obras como la Institutio oratoria de Quintiliano o el De institutione musica de Boecio. El tercer subapartado está dedicado al organum, del que se dan datos sobre su origen griego y se contempla su evolución como instrumento en el período tardoantiguo y medieval. El cuarto subapartado desarrolla los términos ‘auténtico’ y ‘plagal’, determinantes en el desarrollo de la teoría musical medieval. El último bloque, (Z) «Índices» (pp. 835-945), incluye los listados de términos y conceptos; de abreviaturas de autores y obras; y de referencias bibliográficas. Incluye además el apéndice «Elementos de la teoría musical antigua», muy útil y valioso por sí mismo, y finaliza con el índice general del contenido del libro.
Como conclusión, este libro que, en palabras del autor, no pretende realizar un estudio general y sistemático de la terminología musical de base grecolatina, es sin embargo una obra que ofrece mucha luz en los estudios de música antigua, de la que se conservan muchos textos teóricos pero pocas notaciones musicales y que muchas veces resulta un campo de investigación abstracto y oscuro.