La epigrafía sobre cerámica constituye un material heterogéneo cuya atención por parte de los investigadores tradicionalmente fue menor en comparación con otros géneros como las inscripciones monumentales o la epigrafía jurídica. Habitualmente estas inscripciones eran etiquetadas dentro de la categoría genérica de instrumentum domesticum y descartadas de las grandes catalogaciones epigráficas.
Afortunadamente, el panorama ha cambiado en las últimas décadas. El debate académico sobre la Ancient Literacy abierto por la clásica obra de William V. Harris ha potenciado el interés por la escritura en el ámbito privado como evidencia directa y socialmente transversal de la alfabetización. Muy relacionada con esta vía de trabajo está el análisis de este tipo de textos en relación con la latinización lingüística y la perduración de las lenguas indígenas. En cuanto a la epigrafía anfórica, los estudios de José Remesal y su equipo desde los años 80 del siglo pasado han señalado la utilidad no solamente de los sellos sino también de los grafitos y los tituli picti para interpretar la economía política del Imperio Romano.
En paralelo a estas líneas de investigación, aún abiertas, se ha realizado un importante esfuerzo por la adecuada publicación y edición de los textos sobre cerámica, especialmente los esgrafiados. Ejemplos pioneros fueron la publicación del conjunto galo-romano de La Graufesenque en 1988 o los fascículos seis y siete del segundo volumen del Roman Inscriptions of Britain de 1994 y 1995. Recientemente el foco se ha trasladado al limes renano y la Galia oriental con las monografías sobre los grafitos de Raurica Augusta, colonia Ulpia Traiana y Autun y sus alrededores. Aunque nuestro país se incorporó más tarde a la tendencia, ya en 2003 se publicó el volumen quinto de las Inscriptions romaines de Catalogne, dedicado exclusivamente al instrumentum domesticum. En la última década, además de una revisión sistemática de los textos más tempranos, incluyendo los realizados en lenguas y escrituras vernáculas, se han editado diversos conjuntos locales como, por ejemplo, los del ager Tarraconensis, Edeta o Labitolosa, destacando en ese sentido la reciente monografía sobre el material procedente de Emerita Augusta publicada en Cuadernos Emeritenses.
Queda por tanto claro que la obra que reseñamos se enmarca en una corriente metodológica actual que pone en valor este tipo de registro epigráfico. Editado por la casa suiza Droz en su colección de estudios del mundo greco-romano, L’epigraphie sur céramique. L’instrumentum domesticum, ses genres textuels et ses fonctions dans les sociétés antiques recoge los resultados de un coloquio internacional organizado por la Universidad Libre de Bruselas y la Gante y celebrado en esta última los días 17 y 18 de diciembre de 2015.
El libro cuenta con once capítulos, agrupados en tres secciones temáticas: historia económica (Questions économiques et administratives), historia social (Questions sociales) y análisis lingüístico (Questions lingüistiques). Un primer elemento que salta a la vista, y una de las principales virtudes de la obra, es su carácter transversal y multidisciplinar. Las propias trayectorias investigadoras de los coordinadores de la obra dan buena cuenta de ello: Wim Broekaert se ha centrado en la Historia económica del mundo romano, Alain Delattre es papirólogo también con trabajos sobre la escritura cotidiana en el Egipto romano, Emmanuele Dupraz es lingüista y María José Estarán investiga sobre las epigrafías indígenas y la latinización lingüística del Occidente romano.
La primera parte se centra en la epigrafía anfórica como fuente de información para la historia económica. Piero Berni Millet («Producción anfórica en Hispania. La evidencia de la epigrafía») analiza las producciones anfóricas del valle del Guadalquivir y la costa catalana y la relación de grafitos ante cocturam y sellos con la organización interna de las figlinae. Prosigue Wim Broekaert («The Roman government and the distribution of Spanish oil along the frontier»), que critica al modelo de redistribución de Remesal y su énfasis en el papel del estado romano tanto en la producción como en la distribución de bienes agrícolas. Para Broekaert, la falta de capacidad del estado, un menor grado de dificultad logística para el transporte de lo que se pensaba y la actividad de comerciantes particulares obligarían a revisar las tesis del historiador español y minimizar la intervención estatal.
Prosigue la sección económica el extenso estudio de Mark Lawall sobre la epigrafía anfórica griega y helenística («Marking on Greek Transports Amphoras, 8th through 1st centuries BC»). Distinguiendo una serie de periodos desde el siglo IX hasta el I a. C., Lawall vincula los cambios en las tipologías anfóricas y en los sistemas comerciales con los textos, dejando un tanto de lado los sellos y centrándose en aquellos esgrafiados o pintados. Todo ello le sirve para trazar el paso de un comercio privado, primero en manos del oikos y luego de particulares, hacia una creciente intervención estatal que culmina en época helenística. Cierra la primera parte Rosario Rovira Guardiola («Graffitti ante cocturam on amphorae Dressel 20 and the organization of the figlinae»), con una visión general de los grafitos ante cocturam de las ánforas. Utilizando como referencia los restos del Monte Testaccio y alguna figlina bética, presenta una tipología distinguiendo entre numerales, iniciales y letras, fechas y grafitos nominales, además de los indeterminados.
La segunda parte del libro se ocupa de cuestiones de socio-lingüisticas, presentando unos materiales ciertamente variados en cuanto tipología, cronología y procedencia. El trabajo de Francisco Beltrán Lloris, Carlos Jordán Cólera e Ignacio Simón Cornago («The inscriptions on pottery of Hispania Citerior (2nd – 1st centuries BCE)») consta de dos partes diferenciadas. En la primera, presentan un conciso estudio tipológico de la epigrafía sobre instrumentum de cronología republicana en la Hispania Citerior, mayoritariamente realizada en lenguas y escrituras indígenas. En la segunda parte se concentran en las inscripciones sobre fusayolas de telar, proponiendo una tipología en función de la complejidad del texto y destacando su carácter particular en tanto que estas piezas inscritas solo aparecen en la península ibérica y la Galia. Giovanni Boffa («Why to write on ceramics. The social implications of writing on ceramics artifacts in early archaic Greece (8th – 7th centuries BC)») plantea una panorámica de los primeros textos complejos griegos sobre cerámica, adaptados a la perfección a la comunicación interna dentro del oikos y a las dedicaciones religiosas. En ese sentido destaca el incremento exponencial que se produce en su número a lo largo del siglo VIII a. C.
Emmanuel Dupraz («Les débuts de l’épigraphie sur céramique en lépontique: à quoi sert une marque de propriété?») continúa esta segunda sección del libro con un estado de la cuestión sobre los grafitos lepónticos más tempranos, procedentes de los valles alpinos del norte de Italia y correspondientes con las fases arqueológicas de Golasecca I, II y III (siglos IX a IV a. C.). El lingüista se centra en la funcionalidad de los textos, cuya disposición y vinculación con el soporte indican una clara voluntad de ostentación del propietario del objeto. Eduard Shehi («Graffiti sur objets en céramique découverts en Albanie. (VIe s. av. J.-C. - XIIe s. apr. J.-C.). Une analyse préliminaire») presenta el censo de 120 esgrafiados procedentes de la actual Albania, en su mayoría monogramas, letras y antropónimos, datados desde época Clásica hasta bien entrado el Medievo. Se trata de una primera aproximación sobre una cuestión escasamente tratada por la historiografía local.
La tercera y última parte de la obra recoge tres estudios con un marcado perfil lingüístico. María José Estarán Tolosa («La latinisation à travers des textes sur céramique. Bilinguisme, changement linguistique et ‘romanisation’ de l’épigraphie d’usage quotidien») analiza el uso del latín y de las lenguas locales en grafitos y sellos en el marco de la latinización lingüística de Europa Occidental. Dentro de la línea metodológica de la “epigrafía comparada”, la autora española introduce interesantes apreciaciones como la distinción funcional y textual entre los estampillados internos y externos, el valor de los grafitos cerámicos como testimonios cercanos a las lenguas habladas o la importancia de la elección lingüística.
Andreas Gavrielatos («The value of names on ceramics for the study of “bilingual onomastics”») prosigue sobre la cuestión de la latinización, en este caso enfocándose en la Galia. Partiendo de los antropónimos registrados en la terra sigillata Gallica, Gavrielatos propone una taxonomía de los procedimientos de adaptación de la onomástica indígena a la latina, así como unas interesantes reflexiones metodológica al respecto. Cierra el libro la contribución de Ignacio Simón Cornago («Los ostraka ibéricos»), una recopilación de ostraka con textos en lengua ibérica procedentes del noroeste de la península ibérica. Pese a ser un conjunto pequeño, compuesto únicamente por seis ejemplares, resulta de interés como muestra del uso de la escritura en actividades comerciales o administrativas; de hecho, dos de los textos presentados recogen listados de nombres personales.
Concluyendo, además de las cuestiones tratadas específicamente en cada capítulo, el lector encontrará en este libro un útil estado de la cuestión sobre algunas de las vías de trabajo más actuales en campos como la epigrafía, la historia socio-económica o la lingüística histórica. Como ya apuntamos, la diversidad de temas y materiales tratados (más allá del leit motiv común de las inscripciones sobre cerámica) constituye precisamente uno de sus atractivos, enmarcándose en una creciente tendencia metodológica a la comparativa entre diversos espacios culturales o cronológicos, una aspiración que estaba ya en el propio coloquio del que deriva el libro. Por último y desde el punto de vista técnico, la obra se encuentra bien editada, con un adecuado material gráfico aportado por los autores que sirve para ilustrar las argumentaciones y acompañada de un útil índice toponímico.